Casi Saliendo

El mes de febrero quede pendiente con mi escrito mensual, aparte de un mes corto fue también bastante malo en tomas de decisiones por nuestro amado pueblo que con el tiempo se sabrá si así fue.

Marzo nos llevó el tiempo en avanzar enormemente con nuestro proceso, luego que en el cumpleaños de Sofía nos llegara la noticia que se quitaba la restricción del ex presidente Donald Trump para proseguir con nuestro trámite migratorio.

A partir de ahí se ha logrado avanzar hasta ya casi estar a un pie de poder alcanzar nuestro objetivo del año 2020. Ha sido una experiencia muy nueva para nosotros cinco pero lo hacemos con mucha alegría y emoción, siendo muy positivos de que todo nos irá bien y que pronto cumpliremos uno de los sueños de mi papá, que por cierto el 5 de abril cumple ocho años de que se nos fue materialmente. Se que estaría muy contento de que estuviéramos a salvo. Logrando muchas cosas que él también logró y que quería para nosotros. El siempre nunca estuvo conforme de que hayan sido él y mi mamá los que hayan salido de la casa hacia EEUU, porque lo normal y común era que los hijos se fueran y los padres estuvieran solamente recibiendo. El camino nuestro fue diferente y a ellos se les facilitó mucho mientras que yo me forjaba el mío por mi propia cuenta quedándome en el país.  

Mi mamá y papá salieron del pías en 1995 y 1997,  24 años después ya no soy solo yo sino que somos cinco los que saldremos. Una espera de un año debido a la pandemia nos ha tocado, llegar al límite de la paciencia y porque no toca de otra. 

Ahora estamos un poco nerviosos, ansiosos pero con mucha motivación de reiniciar nuestro proyecto de vida, cada uno en lo suyo. Los niños con un camino de estudios, aprendizajes, de adaptación. Mientras que nosotros a ubicarnos en el mundo laboral primero en lo que nos toque y luego veremos si reiniciamos nuestro camino profesional.

Los días son largos y monótonos, como seguir en un bucle del tiempo y el espacio. Esperamos que llegue pronto ese nuevo amanecer y seguir forjando nuestro presente y futuro. 

En este día especial, agradezco a la familia Martínez por su paciencia con nosotros y darnos espacio en su casa, la familia Guardado que no estando mi papá (QEPD) han sido un gran soporte todos estos años y les viene una gran prueba con nosotros y también agradecer a mi esposa Ethel que ha cuidado cada paso de nuestro proceso por dar este paso. Por último a mis hijos por quienes sigo adelante y trato de guardar mi vida y no perderme en el intento.